Catas de la AMS: Compañía Bodeguera de VALENCISO
Cata de los viernes en la AMS-Asociación Madrileña de Sumilleres. Madrid, 26 de enero de 2018
Invitado: Compañía Bodeguera Valenciso – D.O.Ca Rioja – Ollauri – La Rioja

Presentación
Luís Valentín: VALENCISO es una realidad creada por el impulso de Carmen Enciso y yo en el año 1998. Somos gente del vino, surgió después de 15 años trabajando en Cosme Palacio y la salida accionarial de la familia y del Grupo Seagrams en la bodega.
Quiero hablar de esta etapa por hacer honor a mi maestro y amigo Jean Gervais, la bodega Cosme Palacio fue vendida por falta de relevo generacional en la familia. Nunca olvido una frase que me dijo: El mundo del vino es un mundo de detalles.
Allí vivimos la etapa del asesoramiento de Michelle Rolland, el famoso enólogo itinerante que en Bodegas Palacio lideró la corriente de renovación de los llamados “Nuevos Riojas”. Se comercializaban 3 millones de botellas y ya en aquella época se exportaba más del 65% de la producción, funcionaba muy bien.
El viñedo de La Rioja está repartido en 64.400 propietarios, eso hace que el vino tenga esa enorme importancia social y económica en una región tan pequeña, el 80% del viñedo pertenece a agricultores que venden su uva a bodegas o forman parte de Cooperativas.
Somos 600 bodegas con registro embotellador, de ellas, solo 400 tienen registro de crianza.
Un año bueno se vende casi 400 millones de botellas, se exporta casi el 40%.
Las variedades tintas suponen el 93%, el 82% es Tempranillo con 52.000 Ha.
Nuestra única variedad de uva tinta es la Tempranillo, proviene de 17 parcelas de nuestro entorno, en Ollauri, Briones, Haro, Rodezno y Villalba, el viñedo más lejano está a 11 km de la bodega. Seis de las parcelas están en vaso y once en espaldera, la edad media es de 36 años. El noroeste de la DOCa. Rioja.
Los suelos son arcillo-calcáreos y corresponden a la depresión montañosa de la Sierra Cantabria. Sistema montañoso originado, al mismo tiempo, como consecuencia del surgimiento de los Pirineos en el cuaternario.
El clima es atlántico, pero con temperaturas templadas debido al paraguas que forman los dos grandes sistemas montañosos, al norte Sierra Cantabria y al sur el Sistema Ibérico. Es muy importante la influencia del río Ebro (atraviesa toda La Rioja), en el clima y también en los suelos.
La helada de abril de 2017 fue terrible, para haceros una idea, una de las parcelas que nos cuesta podar 50 horas este año han sido 108 horas, cuesta formar otra vez los brazos y eliminar madera seca, esta poda es delicada y la estamos haciendo nosotros, el equipo fijo. Hemos tenido solo el 39% de la cosecha.
Nuestra viticultura siempre ha sido sostenible con prácticas orgánicas, desde el año pasado, VALENCISOes oficialmente de viticultura orgánica. Con el cambio climático, sobre todo en los últimos años, viene a ser lo mismo ambas prácticas.
En el año 2006 empezamos un proyecto de I+D basándonos en la práctica biodinámica para bajar los rendimientos a 5.000 Kg/Ha, el objetivo era reducir el diámetro de la baya y controlar su peso. Esto lo aplicamos sabiendo que en Rioja venimos de una viticultura de cantidad y que la Tempranillo es productiva y propensa al peso.
Comenzamos con 100 barricas en instalaciones alquiladas y sin viñedo propio, el primer año fue la cosecha 1.998 e hicimos 30.000 botellas. Ahora la producción media es de 130.000 botellas/año. Exportamos más del 60% a 41 países, nuestro mercado mayor es Inglaterra.
El restaurante El Bulli nos dio un gran impulso, eligieron Valenciso Reserva 2001 como vino por copas, fue de una repercusión enorme, sobre todo nos abrió rápidamente el mercado de la exportación.
Toda la vendimia se realiza a mano, no soy partidario de la mesa de selección, solo como último recurso en los años de botrytis, la selección se hace en la viña y la uva cuanto antes al depósito.
Los racimos se despalillan pero sin estrujar la uva, esto es importante si se desea realzar la finura en el vino. La fermentación del tinto se hace en depósitos de cemento de 25 cm de grosor en nave de temperatura fría. También son utilizados para su posterior y larga armonización tras el paso por barricas.
Decía Emile Peynaud, el padre de la enología moderna, que el secreto de un gran vino es la extracción suave.
*Depósitos de fermentación, estabilización y crianza de vinos en cemento.
La fermentación en cemento es menos extractiva, esto nos viene por la influencia francesa, la escuela de Petrús que sigue con cemento, Château Cheval Blanc en su bodega en Saint Emilion tiene una nave de elaboración montada en el 2010 con depósitos de cemento, tienen forma de lágrima y están hechos en Italia. Deben haber valido un riñón y es inversión reciente, por algo será, también Chateau Lafite-Rothschild, etc.
Los depósitos de cemento no sirven para los vinos que se pretende sacar color y riqueza de tanino. Sí, hace que el vino este más vivo durante más tiempo, sostiene más tiempo el color y también mantiene mucho los aromas iniciales. Con la fermentación maloláctica, la merma de color con el cemento es mínima, hace que los vinos estén más estables debido a la ausencia de ionización. Esto se ha probado en una tesis doctoral en la Montpellier.
No provocamos la maloláctica, es una tendencia de la enología moderna que ha venido del Nuevo Mundo, no nos preocupa, tenemos la bodega hundida y el vino protegido en invierno a 8 grados de temperatura. Tras realizar la fermentación alcohólica, nuestros vinos tintos son trasegados a otros depósitos de cemento hasta que realizan la maloláctica de forma voluntaria. Una vez terminó en la segunda semana de julio, lo normal es a final de mayo o principios de junio. Después lo pasamos a barricas.
Para la crianza del vino tinto utilizamos barricas de roble francés albar, Quercus pétrea, de Radoux y Seguin Moreau. Tiene el grano muy fino y mínimo tueste para preservar los aromas de la uva.
Nuestro VALENCISO blanco está fermentado y permanece durante 9 meses en barricas de roble ruso. Solo utilizamos el de Seguin Moreau y con un 10% nuevo; es de la misma especie de roble que el francés pero su origen es el Cáucaso (Krasnodar), en la costa noreste del Mar Negro. Tiene un crecimiento más lento, su poro es más cerrado, razón por lo que respeta más la fruta, hay menos intercambio.
Esto se lo debemos a nuestro amigo difunto Denis Dubourdieu, se encargó de llamar Seguin Moreau para autorizarle que nos aplicaran el mismo tostado ultraligero y tratamiento que a los suyos. Todo un regalo, lo mismo que un dosier suyo sobre el prensado controlando el pH y otros consejos.
Hemos trabajado con varias tonelerías, un 80% de lo que hay en Valenciso es de Radoux, un tonelero que en degustación tiene menos boca, hoy lo llamamos verticales, pero que en nariz nos gusta mucho, hace vinos un poco más tiesos, más duros.
Tenemos algo también de Seguin Moreau… la esencia es seguir con Radoux en tintos y su barrica “Tradición” de bosques del Allier y el Nièvre, con un tostado ligero-medio, no queremos cambiar el estilo del vino, nos gusta mucho sobre todo en la nariz, muy importante para nosotros.
También tenemos algunas de sus “Blend”, mucho más caras, ideales para cortas crianzas, a la larga no se nota tanto la diferencia. Hemos hecho pruebas y funcionan sus nuevas barricas “oakscan” que vamos a complementar, dicen que no es tan importante el bosque como el tanino que aportan al final.
Han desarrollado una técnica con la Universidad de Burdeos, analizan duela por duela con un sistema de infrarrojos y clasifican por “A”-“B”-“C”-“E” en función del contenido de taninos. Entonces se puede encargar las barricas con tipo de duelas, incluso con mezclas, nosotros llevamos dos años utilizando las “A” y”B”, con un contenido tanico más bajo para resaltar la finura de nuestros Tempranillos, nos está dando buen resultado.
Ningún VALENCISO está clarificado, le quitaría al vino un poco de chicha, cuando el vino tinto sale de barrica lo pasamos a los depósitos de cemento otro año, ya que se ensambla mejor, sigue sedimentando y mantiene los aromas. Algo que nunca haría si tuviera inox.
Al no clarificar tenemos Certificación Vegan Society para el comercio anglosajón.
Nuestro único vino tinto ha sido solo con etiqueta “RESERVA”. En su momento lo hicimos así porque ese tipo de crianza ayudaba al consumo de o regalo festivo, una forma de engancharse a una divulgación en marcha con calidad. Hoy percibimos que hay un sector de gente joven que en los restaurantes pasa la hoja de reserva, les parece vinos tradicionales y consumen los nuevos con etiqueta genérica.
En el consumo de exportación la palabra “Reserva” no está regulada, para un americano es una competencia desleal con el Nuevo Mundo, estos la incluyen en muchos de sus peores vinos y se vende a 5 dólares. Un artículo reciente, de la prestigiosa revista norteamericana Wine Spectator, decía que «es una palabra vulgarizada en las etiquetas», aconsejaba a sus lectores no prestar observancia, una forma de huir de su consumo.
Las ventas del año 2016 en la DOCa. Rioja fueron un 43% de Genérico, un 38% Crianza, el 17% Reserva y 2% GR. El año 2017 aún no está cerrado, pero está subiendo un 5% el Genérico, se mantiene el Crianza, baja el Reserva y se mantiene el GR; este, poco significativo en cantidad, hace 30 años se vendía el 8%.
Estos datos nos hacen pensar en la posibilidad de pasarnos a Genérico. Su elaboración da más libertad.
Nuestro tipo de vino VALENCISO lo hacemos para comer. En una de las últimas apariciones de Denis Dubourdieu en Madrid dijo: hago vinos para beber no para escupir ni para tener 100 puntos.
La cata
Apunte del redactor: Hoy es un día de “raíz” según el calendario biodinámico . Un día para el trago rápido, el vino está amuermado, contraído, y no hay que molestarle. Un día donde ensalzan los taninos, estos no se pueden esconder, ideal para valorarlos. Un día no adecuado para mover, trasegar o correr el vino, saldrá turbio, aunque la pajuela sea fina.
1º. VALENCISO Blanco 2016 – Variedades: 70% Viura y 30% Garnacha blanca de viejos viñedos, plantados entre los años 1915 y 1920, 13,6% vol – 6 g/l de acidez con pH bajo.
Añada: Las reservas del invierno lluvioso ayudó al crecimiento y desarrollo de la uva con una primavera y verano muy secos, llovió intermitentemente a mitad de septiembre permitiendo la maduración progresiva, sin bloqueos y con una voluntaria baja producción. Vendimia manual con uva sana desde el 28 de septiembre al 6 de octubre.
Fermentado en barrica de roble del Cáucaso del fabricante de Seguin Moreau, solo un 10% es nuevo, tiene tostado ultraligero. Recipiente donde sigue su crianza con un batonás y control semanal hasta la primera semana de abril de 2016. Después no continúa la crianza con ensamblado, se embotelló a la semana siguiente. Producción: 10.000 botellas tipo borgoña de 0,75 cl y 514 en Magnum.
El reto intelectual era hacer un blanco para que su evolución le vuelva cremoso. Creo que estamos en la buena dirección, si hubiera estado esos 9 meses en roble francés el impacto de la madera sería mucho mayor, a pesar de su juventud ya tiene una sensación melosa que le viene del roble y va a cambiar durante la degustación, espero que os guste. En las añadas antiguas observamos esa paleta cremosa, están ligeramente dorados, pero muy vivos por su elevada acidez.
Juanma del Amo lo define con impronta nariz tímida, pero no tarda en abrirse, la evolución tiene un camino largo de aromas sutiles, todo en su justa medida, sin exceso, complejo. En boca coge volumen, más esférico que recto, untuoso, algo denso pero con frescura y mineralidad, buen equilibrio de notas especiadas, sutiles, con peso de fruta fresca y floral. El final del trago deja algo de amargor, lo alarga, el postgusto es medio-largo y complejo. Un vino aún joven con falta de botella para crecer y ser grande.
Crianza de exportación
Quiero confesaros que hacemos 10.000 botellas de vino tinto crianza con una viña joven, comenzamos las primeras cosechas vendiendo a granel, luego lo exportamos a EEUU donde gusta mucho, y actualmente lo repartimos en tres países. En cata a ciegas sorprende y queda muy bien, es un vino transitorio, mientras el viñedo madura hasta ofrecer el necesario equilibrio y armonía.
2º. VALENCISO Tinto Reserva 2008
14,5% vol – Tempranillo 100% – 17 meses barrica de roble francés albar, “Quercus pétrea” de Radoux y algo de Seguin Moreau, grano muy fino y poco poroso, 1/3 con barrica nueva y tostado medio a ligero.
Añada: Con 477 l/año, fue una cosecha lluviosa, casi alcanzamos los 485 l/año que es la media en la zona. Llovió sobre todo en primavera y en junio, con lo que acortó el ciclo, después fue cálida. Fue una añada cálida, parecida a la 2006.
Jesús Gómez: Es un vino con mucha fruta madura y recuerdos primarios, un vino con peso de fruta en boca, con buen tanino, da notas algo tostadas o torrefactas muy ensambladas con las especiadas, un vino sabroso y con amplitud, solo al final de boca los efectos de la barrica la seca un poco. Pero es un buen vino que expresa la finura del Rioja norteño.
Luís Valentín: Buscamos vinos con volumen aromático, que tapicen muy bien y tengan mucha persistencia, como los vinos típicos finos de Haro, que no predomine la barrica, buscamos mucho equilibrio. Tiene fruta muy madura, típica de guinda.
Hoy día nos movemos entre 14 y 14,5% vol debido al cambio climático, no podemos bajarlo, la añada 2001 fue nuestro único vino por debajo de los 14% vol. Cuando nos preguntan en el extranjero porque tenemos tanto alcohol les digo que no añadimos nada, es el azúcar que coge la uva con nuestro clima y suelo.
Hay tres factores que han incrementado el alcohol algo más de un grado en el vino. El más significativo es el cambio climático. El segundo es la mejor viticultura; si busco rendimientos de 5000 Kg/Ha, en lugar de 7000, voy a concentrar todo, también con más azúcar. El tercero es la utilización de los equipos de frío, evitan los subidones de temperatura y hace que la levadura viva más tiempo dejando menos azúcar residual. Este, en menor medida.
Los rasgos de fruta del vino VALENCISO es por la utilización de cemento, utilizamos el grano entero, despalillamos pero no estrujamos, no damos importancia al color, es para que tenga el vino esos tonos a regaliz de palo que sale tanto en la maceración carbónica, hacemos una estación muy suave remontando, ni rompemos el sombrero, ni lo hundimos. Con esto favorecemos los aromas y el cemento va mantener mejor la viveza y la fruta.
Buscamos vinos con volumen aromático, que tapicen muy bien y tengan mucha persistencia, como los vinos típicos finos de Haro, que no predomine la barrica, buscamos mucho equilibrio. Este vino tiene fruta madura, típica de guinda.
3º. VALENCISO Tinto Reserva 2011
14,6% vol – Tempranillo 100% en Viticultura Sostenible – 18 meses barrica en un 90% barrica de roble francés con 1/3 nueva, el resto con menos de 3 años y un 10% en barrica de roble ruso. Realizó la fermentación maloláctica de forma espontánea en abril.
Se adelantó la vendimia para evitar el descenso de la acidez. Se inicia el 27 de septiembre. Destaca el bajo peso de la baya. El rendimiento fue de 5.140 kilos/ha.
Añada: Muy seca con primavera cálida, 206 litros/año, menos de la mitad de la media, se adelantó la vendimia a septiembre lo sacamos al mercado en noviembre de 2017, el primer vino tinto con un 10% de roble ruso. Creemos que le da más originalidad en nariz, llevamos con pruebas desde 2005 para llegar a esta conclusión; color muy estable, como aportación del cemento, mantiene más la fruta, mantiene más el color, deja la fruta bastante confitada, ha estado dos años y medio en cemento.
Es un vino de más fruta madura, algo ya confitada, sabroso y ligero, con peso en boca por la abundancia de taninos, matices muy vivos, vislumbra cacao y mentolados. También persistente pero menos largo que la añada 2010 de solo roble francés.
A partir de esta añada todos nuestros vinos VALENCISO Tintos tendrán un porcentaje similar de roble ruso, creemos que dan buen resultado, en boca aportan unos taninos algo más llamativos, pero hay mucha diferencia en nariz, vemos que con el tiempo la diferencia en boca respecto a su textura desaparece, pero añade originalidad en nariz.
El roble del Cáucaso nunca va a perjudicar la elegancia, tampoco las notas sutiles de pastelería o especias del roble francés, pero le añade un incremento balsámico que con el tiempo se abre a mentolado y muy especiado.
Cata de Custodio López Zamarra, nuestro presidente de honor.
Quiero mucho a esta bodega, a Carmen y a Luís les he visto arrancar y crecer con Valenciso, está en la carta de Zalacaín. Los vinos con marca Valenciso representan la elegancia y el equilibrio, este vino es jugoso, pero vivo porque tiene una buena acidez, a pesar de su añada cálida, su abundante tanino ya es maduro y acariciante, ayuda a recrear el vino en la boca, un vino de una tipicidad contemporánea. Repito, a destacar su equilibrio en boca, un vino de excelente relación calidad/precio, un vino que nunca te va a defraudar en una recomendación o regalo, un vino que cuida la cartera del cliente y al mismo tiempo le da placer. Esa jugosidad y frescura en boca me encanta, y nos deja un prolongado recuerdo.
4º. VALENCISO Tinto 2007 – “10 años después”
14,5% vol – 100% Tempranillo – 8 años de crianza en roble francés y depósito de hormigón – Embotellado en junio de 2015 – Comercializado en noviembre de 2017 – Producción de 4.000 botellas – Un vino Valenciso muy especial, sale en las mejores añadas.
Luís Valentín: Vendemos casi todo este vino fuera, solo queda aquí algo puntual, nuestro principal cliente en España es el restaurante Lasarte de Barcelona, un buen cliente; en Madrid el restaurante Coque, El Celler de Can Roca ayer pidió las botellas que le quedaba al distribuidor de Barcelona. Los Pantagrueles de Madrid también somos clientes.
Añada fría, el verano registró muchos días con bajas temperaturas y tanto el envero como la maduración de la uva fue lenta y prolongada. A pesar del menor tamaño de las bayas acertaron los que se desprendieron de carga de uva y los que cosecharon con viejos viñedos. Septiembre facilitó la maduración fenólica y la vendimia acertada fue muy espaciada, prolongada.
Paco del Castillo opina que la nariz está en la línea de la bodega, al principio discreta y luego se va abriendo con armonía, sin prisas, buen contenido de fruta diez años después, aromas de fruta madura y especiados, da la sensación de que el vino puede seguir creciendo en nariz. La boca también guarda el estilo de la casa, de fácil entrada y luego se hace jugoso, riqueza tánica, muy vivos 10 años después, pero amables, con excelente acidez en buena estructura, persistente. Se puede tomar ya pero es un vino con mucha vida por delante.
Según Luís Valentín fue una añada fresca, no fría, añada tipo de los años 80 en Rioja antes del cambio climático. Tiene menos boca que su hermano del 2005 (más concentrado), es más recto, pero ambos se parecen en ese tanino tan vivo y abundante. En nariz es de una gran sutileza.
Creo que nuestro “VALENCISO 10 años después” es un gran vino.
Con este vino se sienten dichosos en Valenciso, una realidad que recoge el verso que eligieron de La Eneida para su escudo: «Audentis fortuna iuvat» (la fortuna ayuda a los audaces).
Les recuerda el reto que asumieron al crear Valenciso.
Este vino es una recompensa al largo camino de trabajo y sacrificio, a ese espíritu de estudio, de búsqueda y de riesgo.
I + D Valenciso: Cata de vinos de ensayos en barricas
Las diferencias de robles provienen de la especie de cada árbol, es un elemento vivo y cada uno aporta sus cualidades, con la incidencia experta del conocimiento humano.
Vamos a catar un mismo vino Tempranillo cosecha 2012, no muy concentrado (para que acusara más el efecto de la madera), envejecido durante 14 meses en barricas distintas y embotellado recientemente.
5.X. Tinto Tempranillo barrica roble Americano cosecha 2012
5.X1. Intensidad
5.X2. Vino más rustico, acidez más cítrica,
5.X3. Aromas de pastelería, dulzones, coco, vainilla, canela, torrefactos y ahumados
Los robles americanos aportan menos taninos y por ello los vinos son más suaves
Lo veo demasiado duro, agresivo, con un tanino muy secante, le sale el aroma cítrico, a corteza de naranja cuando la barrica es nueva y no lleva mucho tiempo en ella, no hay torrefactos porque su tostado es ligero-medio, pero es más propenso, tiene menos taninos que el roble francés, por lo menos un 50%, este americano es más dulzón, con los años va a dar un final de boca dulce.
El mayor tamaño de los poros generalmente provoca que la barrica americana transmita sus cualidades al vino en menor tiempo. Algo de esto se aprecia comparativamente, ha entregado al vino mucha personalidad. Le falta redondear en botella, es de libro. Le sale el indicador “whisky lactonas” de los vinos envejecidos en roble. Es la metil-lactona (los isómeros cis y trans de la beta-metil-gamma-octolactona.
6.Y. Tinto Tempranillo barrica roble Francés cosecha 2012
6.Y1. Complejidad
6.Y2. Vino elegante y profundo
6.Y3. Especies, clavo
Francés 2012. Hace vinos estructurados con registros sutiles y armoniosos.
Los robles franceses comunican más carácter aromático a los vinos.
Lo definiría como un vino que marca muy bien la fruta, la que tenemos es fresca, hace al vino largo. Ensambla con armonía la fruta y la buena acidez, con equilibrio, aporta casi un 50% más de taninos que el roble americano, son más suaves y envolventes, el resultado es un vino más vivo y elegante que el anterior o americano.
7.Z. Tinto Tempranillo barrica roble Ruso cosecha 2012
7.Z1. Vino con tanino muy vivo, pero no astringente, aunque se puede confundir, abundante
7.Z2. Balsámico, en nariz le cuesta salir
7.Z3. Plantas, hierbas, aceitunas, mentolado. Registros de vermut
Ruso 2012. Hace vinos estructurados con registros nítidos. Tanino firme o tieso pero abundante
Muy vivo, sensación de acidez alta, da notas balsámicas, tonos de hierbas, un poco anisado. De color medio entre los dos anteriores. Los taninos son un pelín más agresivos y la nariz más discreta.
A raíz de las pruebas que hicimos en el 2005 a los consumidores les gusta el roble Ruso, inicialmente no, porque al principio es muy tímido, pero al final de la cata se va imponiendo.
El efecto de la crianza de vinos en madera es un tema que me apasiona. En los años noventa, mi jefe en Cosme Palacios me hizo estudiar mucho de barricas, estuvo a punto de montar una tonelería en Rioja al cincuenta por ciento con Radoux. Tuve que aprenderme hasta tesis de la Sorbona.
Luis Valentín: En Rioja hay 1.300.000 barricas, se estima que el 80% es roble americano, hace unas décadas era casi el único, pero históricamente no siempre ha sido así.
En los libros de Cosme Palacios en los años de la fundación de la bodega en el siglo XIX no hay nada de americano, todo era de roble francés o de Bosnia, algo similar ocurría en casi todas las bodegas de Rioja. Parece que nos llega con la primera guerra mundial y la nula posibilidad de acceso al mercado francés que está inmerso en la contienda, con lo cual desaparece ese comercio y pasamos a otro proveedor. La continuidad con el roble americano se debe también a nuestras dificultades comerciales durante décadas, es más una necesidad económica que deriva en costumbre.
Este año tenemos 5 barricas con Graciano, llevo desde el 2008 intentando hacer un graciano que madure bien, este año lo hemos conseguido, el objetivo es que salga monovarietal, está haciendo la maloláctica en barrica. Ha madurado bien porque tuvimos el otoño cálido y seco, un ciclo largo.
Hacemos 2.000 botellas de VALENCISO Rosado, desde la añada 2016 prolongamos un año su crianza con lías. Embotellaremos ahora el 2016 para que coja botella. Es un vino que me viene muy bien para explicar el Tempranillo, tiene y manifiesta abiertamente todos sus aromas varietales: Guinda, frambuesa, grosella, regaliz de palo… Sale con bastante cuerpo, solo tenemos tres barricas.
Lo que queremos Carmen Enciso y yo de nuestros vinos es que sean Rioja Alta muy norteños, que nos recuerden a ese paseo veraniego por el viñedo en el atardecer y al levantarse ese viento refrescante, te haga estremecer inmediatamente, ocurre cuando sopla del norte.
Damos prioridad a la acidez, son vinos tímidos porque buscamos más nariz que peso en boca, lo que llamo volumen aromático, que no pese en la boca pero tapizando muy bien y dejando largo recuerdo.
¿Qué es un gran vino?.
Cuando me lo preguntan, contesto que ha de tener dos requisitos. Que cambie en la copa, su riqueza ha de mostrar caras distintas, con mucha complejidad; y segundo, ha de tener un final muy largo.
Estos requisitos están en todos los que se consideran grandes, no tiene que ver con el estilo del vino, puede ser un vino muy sutil, un vino mermelada o de cuchillo y tenedor, en los dos extremos puede haber un gran vino, independientemente de los gustos personales.
Este es nuestro objetivo en VALENCISO, hacer buenos vinos.
Fín. Por Florentino Ordóñez «Vino Rancio»
Puedes seguir la actividad y las publicaciones de VALENCISO en su interesante blog: https://www.valenciso.com/blog/
Galería de fotos de la cata: